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Marie Curie en su laboratorio
Marie Curie, nacida Maria Sklodowska en Varsovia, Polonia, en 1867, es una de las científicas más importantes de la historia. Desde joven, mostró un excepcional talento para la ciencia y las matemáticas, a pesar de las limitaciones impuestas a las mujeres en su país natal. En 1891, se trasladó a París para estudiar en la Universidad de la Sorbona, donde destacó en física y matemáticas, obteniendo sus títulos con honores. En París, conoció y se casó con Pierre Curie, y ambos establecieron una colaboración científica que revolucionaría el campo de la física. Sus investigaciones sobre la radioactividad les hicieron merecedores del Premio Nobel de Física en 1903.
Tras la trágica muerte de Pierre en 1906, Marie continuó su investigación, y en 1911 fue galardonada con un segundo Premio Nobel, esta vez de Química, por sus descubrimientos del radio y el polonio, y sus estudios sobre la naturaleza y el comportamiento de estos elementos. Marie Curie no sólo hizo avances fundamentales en la ciencia, sino que también derribó barreras en una época en la que las mujeres enfrentaban grandes obstáculos en el acceso a la educación y la investigación científica. Su dedicación incansable y sus logros extraordinarios dejaron un legado perdurable, inspirando a futuras generaciones de mujeres a seguir sus pasos.
Como ella, la historia de la ciencia está llena de ejemplos de mujeres valientes y decididas que se atrevieron a desafiar las convenciones y adentrarse en campos hasta entonces dominados por hombres, demostrando que los mitos y los estereotipos sobre la capacidad según el género no tienen ningún tipo de fundamento.
“ No hace falta temer nada en la vida, sólo tratar de comprender.
Ahora es el momento de comprender más, para que podamos temer menos
— Marie Curie

Ada Lovelace: la primera programadora de computadoras. Ada Lovelace, hija del poeta Lord Byron, es reconocida como la primera programadora de ordenadores. En el siglo XIX, Lovelace trabajó con Charles Babbage en su diseño del motor analítico, una máquina considerada una precursora del ordenador moderno. Ada escribió el primer algoritmo destinado a ser procesado por una máquina, demostrando que el pensamiento lógico y matemático no es exclusivo de la mente masculina.

Katherine Johnson: la matemática que llevó el hombre a la Luna. Katherine Johnson, una matemática afroamericana, trabajó en la NASA y fue crucial en el éxito de las misiones durante la carrera espacial. Su precisión en los cálculos permitió que el hombre llegara a la Luna en 1969. Johnson desafió no sólo las barreras de género, sino también las raciales, en un momento en que los dos prejuicios estaban fuertemente arraigados en la sociedad norte- americana.

Hedy Lamarr: innovadora en la tecnología de las comunicaciones. Hedy Lamarr, más conocida por ser una estrella del cine en la época dorada de Hollywood, fue también una brillante inventora. Durante la Segunda Guerra Mundial, Lamarr codesarrolló una técnica de salto de frecuencia para las comunicaciones de radio, una tecnología que se convertiría en la base para las comunicaciones modernas inalámbricas. Su trabajo fue un claro ejemplo de cómo las mujeres podían contribuir significativamente en la innovación de tecnologías avanzadas, desafiando el prejuicio según el cual no estaban capacitadas para ser inventoras o ingenieras.

Rita Levi-Montalcini: neurocientífica. Rita Levi-Montalcini, nacida en Italia, fue una neurocientífica que ganó el Premio Nobel de Medicina en 1986 por su descubrimiento del factor de crecimiento nervioso. A pesar de sufrir discriminación por su condición de mujer y las vicisitudes durante la Segunda Guerra Mundial, Levi-Montalcini continuó su investigación en condiciones adversas, demostrando una vez más que la pasión y el compromiso con la ciencia nada tienen que ver con el género.
